Ir al contenido principal

"Los señores de las finanzas" la historia se repite?



Este libro de Liaquat Ahamed (Lords of finance) titulo en ingles,esta basado en cuatro economistas,banqueros para ser mas exactos,que llevaron a la debacle economica de los años 20. Ahamed narra aspectos de la gran depresion de la mano de 4 individuos que por aquel entonces dirigian los bancos centrales mas importantes del mundo (Inglaterra,Francia,Alemania y Estados Unidos). Estos conformaban el " Club mas exclusivo del mundo" y nos deja entrever,como estos bajo un cumulo de decisiones erroneas llevaron a millones de seres humanos a la miseria,como se paso de la opulencia a la debacle,una mirada a las contradicciones del capitalismo y a la demostracion de que solo basta unos pocos individuos con mucho poder para cambiar el destino de una sociedad en su conjunto.Te parece historia conocida? bueno, este libro ganador del premio Pullitzer de historia el 2010, es un buen recordatorio de que el ser humano no aprende de sus errores y tropieza mil veces con la misma piedra.Sin duda una buena lectura para entender como la soberbia de unos pocos afectan a millones. Los señores de las finanzas, es el recomendado del mes.

Comentarios

Entradas populares de este blog

El poder de la palabra, Gilberto Ramírez Santacruz

Si digo pan y mi poema no convoca a los hambrientos a la mesa, es porque la palabra ya no sirve y la poesía exige otro lenguaje. Si digo amor y mi poema no provoca una tormenta de besos y canciones, es porque la palabra perdió su magia y la poesía debe buscar una nueva voz.

Fragmento de La Campana de Cristal de Sylvia Plath

"Vi mi vida desplegándose ante mí, mi vida como las ramas de la higuera verde [...] En la punta de cada rama, como un grueso higo morado, pendía un maravilloso futuro. Un higo era un marido y un hogar feliz e hijos y otro higo era una famosa poeta y otro higo era una brillante profesora y otro higo era Esther Greenwood, la extraordinaria editora […] Me vi a mí misma sentada en la bifurcación de ése árbol de higos, muriéndome de hambre sólo porque no podía decidir cuál de los higos escoger. Quería todos y cada uno de ellos, pero elegir uno significaba perder el resto, y, mientras yo estaba allí sentada, incapaz de decidirme, lo higos empezaron a arrugarse y a tornarse negros y, uno por uno, cayeron al suelo, a mis pies."

Bocas, Mario Benedetti

¿Dónde empieza la boca? ¿en el beso? ¿en el insulto? ¿en el mordisco? ¿en el grito?